sábado, enero 21, 2006

El regreso de Manuelo: “La vuelta interminable”

Estábamos la semana pasada con M. esperando el bondi. La parada en cuestión se hallaba ubicada justo en una esquina, donde había también un semáforo. Era bastante tarde en la noche, así que el colectivo choto no parecía tener demasiadas intenciones de aparecer. Pero como bien recitaba José Sacristán en cierto filme de antaño: “No estamos solos, solos en la madrugada”... Y digo esto último porque en cierto momento nos percatamos que había un Peugeot 106 (?) plateado que transitaba una y otra vez por donde nos encontrábamos nosotras, en una especie de vuelta interminable... Era evidente que el conductor - de sexo masculino, por cierto - buscaba perseverantemente (contamos al menos unas ocho pasadas) ser demorado por la luz roja del semáforo, para poder de este modo quedarse más tiempo observándonos por la ventanilla del vehículo... Afirmo esto con total certeza pues, el susodicho en cuestión no mostraba asomo alguno de disimulo al mirarnos desde el asiento, con las manos (aparentemente) al volante. ¿Cómo explicarles que en determinado momento nos dimos cuenta que el chofer del automóvil color plata, no era otro que nuestro ya archiconocido Manuelo? ...Hi-Yo Silver!!! ...¡más llanero y solitario que nunca! En fin, que cuando nos avivamos que era él, decidimos estirar nuestro bracito burgués y tomarnos un taxi... No fuera cosa que quisiera bajarse del auto e invitarnos a ver una película, ¿no?...

7 comentarios:

Sebastian dijo...

El del videoclub???
No se puede creer!!!
O sea que las tiene junadas! Fuera de joda, cuidense!
Beso.

¨ce_ dijo...

Lluvia de chanes...
Ustedes siempre lo mísmo?
Jate' joér...
Piedad por la platea masculina.

Dulcinea dijo...

sebastian: El mismo que viste y frota... digo, calza!
No creo que nos tenga junadas, igual tomaremos los recaudos necesarios... Gracias por la preocupación =)
Beso.

¨ce_: Siempre lo mismo, no... en esta ocasión estábamos a cinco cuadras de diferencia de la otra vez (?).
Y creo que lo que menos quiere este "plateísta" masculino, es piedad... je.

gorrata dijo...

Dulcinea, es un pajero compulsivo! Jaja. Más que gracia da lástima semejante especímen.
Besos
Guille

Dulcinea dijo...

gorrata: Sí, sí, totalmente... y ni me preguntes qué usaba en lugar de la palanca de cambios para meter los ídem en el auto, por favor! (más que lástima, da asco =D).
Beso.

Anónimo dijo...

Ah nooo
Es el droopy pajero del barrio!

su exibicion va mas alla de todo lo conocido y ademas ..parece que se les cruza en le camino de la vida, y lo peor es que siempre estan uds dos juntas!

besos
mariana

Dulcinea dijo...

mariana: Sí, ya somos como chanchos con él... El otro día nos faltaba un integrante para el "Dígalo con mímica", y casi le pedimos a Manuelo... pero nos dio miedito que le tocase interpretar "El pájaro canta hasta morir"... =/
Beso.